BYD busca refugio por si Europa cumple su amenaza y ataca

BYD tiene claro que necesita refugiarse en Europa y Estados Unidos si quiere reducir el impacto que podría tener una sanción a China por la investigación por supuesta competencia desleal que inició la Unión Europea en septiembre.

Una multa en forma de nuevos aranceles e impuestos, que buscaría equilibrar el precio de los coches eléctricos llegados de China con el de los fabricantes locales. Y en Estados Unidos están también buscando solución a este asunto, que ha pillado por sorpresa en cierto modo, debido a la avalancha de vehículos 'low-cost' con los que se ha irrumpido en los mercados, a un coste que las marcas europeas aseguran que no pueden asumir.

Hungría sería el destino elegido por Wang Chuanfu, presidente de BYD, para llevar a cabo su maniobra de esquiva de las posibles consecuencias derivadas de la investigación de Bruselas. Las fuentes cercanas a la marca aseguran que el primer ministro húngaro, Viktor Orban, ya se ha reunido con Chuanfu para negociar la estrategia. 

No resulta extraño que BYD elija este destino, pues allí ya disponen de instalaciones en las que fabrican autobuses eléctricos, así que no sería empezar desde cero.

Todavía no se ha hecho oficial la noticia, aunque no tardará en llegar a través un comunicado.

Recordemos que BYD ya ha conseguido desbancar a Volkswagen en cuanto a ventas de coches en China se refiere y, que, además, el país se ha posicionado como el mayor exportador de vehículos del mundo, tras adelantar a Japón, que había mantenido su liderazgo indiscutible durante años.